martes, 5 de octubre de 2010

Ellos decidieron que hay historias qué contar, y sabían que para tener certeza propia sobre sus palabras necesitaban vivirlas primero.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Gracias

Une moderne Olympia

  Hace unos meses lloré tanto en una terapia que sentí que se me había secado el alma, no volví a llorar desde ahí, hasta hoy frente al cuad...