domingo, 18 de enero de 2009
Pozo de deseos
... pero cuando llegó las piedras dejaron de caer para no lastimarla porque ya era suficiente con estar igual de seca que el pozo, pero si ella quiso llegar hasta ahí era porque sabía que ese era un lugar de deseos donde podría aprender a responder a los besos cuando de tanto desear su cuerpo humedeciera las piedras caídas.
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Me desbordo, me deshago en hilos. Las capeluzas del miedo me despintan los colores del alma. El fin promete una separación mayor a toda el a...
Desplazas el efecto de tal manera que lo vivo otra ves Vanessa
ResponderBorrarPoder volar es cosa unicamente de personas lindas como tú .
Hoy deje mis zapatos invertidos dentro del refrigerador, tal vez los saque pa meterlos otra vez
hasta pronto