Vincent van Gogh

Gracias por la esperanza...

Calle van Gogh

Si yo tuviera una ciudad, Vincent van Gogh, todas las calles tendrían tu nombre... y las casas serían pos supuesto: Amarillas

Bufanda para abrigar su cuello mientras canta

 

Inhalando aprieta el gancho esta mano temerosa que torpe entreteje nudos y los desata; luego vuelve a trasponer el agujero con movimientos inoperantes buscando formas de crecer que no funcionan, de cubrir que no envuelven, de abrigar que no arropan, de abrazar su cuello sin respirar siquiera, neciamente queriendo rozar de la lengua esa voz que ondulante hace temblar en la mano aquella ansiedad destemplada de caricias acomodadas que no saldrán de los dedos ni para rasgar la volátil, húmeda y cerrada letra que mejor le suena. Con tanto desaire cada puntada es un delirio. El desatino es el desbordamiento de la sangre en las venas donde rebasa la letra “e” trastocando la significación del lugar mismo, del cuerpo sin un texto que lo perfume y del tiempo al que aún no logro sostener. Adoro su voz pero sobre todo su vos. Mi café se aturde, se enfría, no entiende que cada palabra con su imagen y sonido es para usted, aunque la letra “o” me hunde en otro abismo hacia sus labios, tanto así que puede acercarse a la página y sentir un aroma, el mismo de la niña que ahora le entiende diez años atrás. Mientras la mano cobarde ensarta roces que no puedo palpar, exhalando aprieto mis propias fuerzas y con su rostro tan cerca… cierro los ojos.

Vincent

Tus obras son la semilla del girasol de mi alma.

Si hoy es 2 de marzo

¿Hoy es 2 de marzo? qué rápido pasa el tiempo, hace 3 años ya, estuve con la emoción a flor de piel por haber logrado, después de tantos intentos fallidos, algo que no sabía que serían aún más intentos por fallar.

El 2 de marzo me fui con la mitad de mi alma aún atada a la parte cálida de la Madre Tierra, la parte en que la familia es el corazón, los amigos son familia, donde mejor dicho hay sol, y las frutas son dulces, me fui adonde me esperaban las lecciones más duras y los meses más fríos. Y como los meses fueron tan fríos me volví a ir, a donde hay calidez al menos en la cultura.

Si es cierto que hoy es 2 de marzo puedo decir que toda el agua y la sal que hay de por medio han debilitado y extinguido algunos lazos, pero han avivado otros que no saben a sal sino a miel, a caña, (¿a manjar de leche? ¿a limón con sal? ¿a maracuyá, a mango, a naranjilla?)

Si es cierto que hoy es 2 de marzo, soy feliz y doy gracias porque hay algunas (no tantas) personas, montañas y cascadas que hacen el frío menos frío y la distancia menos distancia.

Mis sueños, me refiero dormida, me siguen regalando esa cercanía dulce, esa raíz no cortada, ese corazón que se enamora, ahí van también los sueños despierta.

Los personajes de mis cuentos, que son los personajes de mi vida, son mi lazo con el mundo sin fronteras.

Y si es cierto que hoy es 2 de marzo puedo decir que no soy la misma, ahora tengo mi gratitud a flor de piel... y el amor ... y no estoy lejos, ya no.