domingo, 24 de marzo de 2019

En mi país, el Ecuador, del cual partí hace 7 años pero del que desde hace dos años me siento exiliada, las autoridades de turno vulneran no solo la constitución, la democracia y al pueblo, sino que además con sus actos de nepotismo y corrupción lo destruyen todo, hoy he participado en las votaciones con la sorpresa de unas papeletas sin números de casillero, cuántas irregularidades para burlarse de la gente. Basta de defraudar al pueblo. La historia los pondrá en su sitio.

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